Latinoamérica invadió los oídos de todos los asistentes del Double Door este fin de semana. El mítico Venue Chicagoan que tuvo sobre sus tarimas a los Rolling Stones , o que vio nacer bajo sus luces a los locales Smashing Pumkins, tendría dos días de música habla hispana.

Jueves, nueve de la noche. La fecha prometía un lleno total. A mi llegada, la fila de gente era ya bastante larga, todos con la misma expectativa: Helloseahorse!

El show arrancó con Pommez Internacional, una banda de Buenos Aires que combina percusiones africanas con dream synths y un rock con letras de protesta.

 

El siguiente turno era del regio Teen Flirt, la mala noticia: la aerolínea vendió su boleto y perdió su vuelo; la buena noticia: se presentaría al día siguiente.

Helloseahorse! estaba listo y el público impaciente por escucharlos. Denisse apenas pisó el escenario y empezó el griterio. Y es que la banda se ha ganado un lugar importante en territorio americano, aunque es bueno destacar que la mayoría del público tenía de americano solo el 50% en su sangre.

Lo cierto es que saben hacer bien lo suyo, excelentes arreglos armónicos en los teclados, efectos análogos bastante completos y brillantes. Riffs de guitarra bien ejecutados y trabajados también en los pedales. Baterías que emulan a una caja de ritmos, sencillas, exageradamente sencillas para mi gusto. Todo esto aderezado con una la voz potente y folclórica de Lo Blondo.

Un set que ya todos conocemos más una canción nueva fue suficiente para echarse al público a la bolsa. Pero no a mí. Urge nuevo material creativo de esta banda, en vivo suenan flojo y repetitivo. Urge también que alguien les diga a estos chicos que tocar en Coachella y trabajar con productores extranjeros no te hace la mejor banda. Urge que se pongan a trabajar en nueva música y en disminuir la vida rockstar.

Afortunadamente, según nos comentaron en la entrevista, se encuentran trabajando en un proyecto bastante interesante, un documental que irá ligado a cuatro temas inéditos producidos por ellos, en una historia que cuenta cuatro situaciones simultáneas, y planean sacar a la luz en mayo, aproximadamente.

Con un sabor de oído amargo, volví a casa cubierto de nieve, ansioso por el día dos del festival. El cartel estaba encabezado por Compass, proyecto de Toño Hernández y Camilo Lara y sus secuaces y apadrinados Milkman, Dusty y a alguien que yo ya esperaba desde el día anterior: Teen Flirt. Para su mala fortuna el lugar no estaba ni al 10% de su capacidad y sus mezclas de Hip-Hop, R&B y trap fueron disfrutadas por un público bastante reducido. No obstante su presentación fue impecable, innovadora y propositiva. Un artista que sin duda habrá que seguir en este año.

La pista de baile comenzaba a llenarse cuando Toño Hernández y Camilo Lara, los ahora bautizados «Compass» arribaron al escenario con cuba en mano y sombreros en la cabeza.

No había tenido oportunidad de escucharlos pero me parecía muy interesante ver a estos dos maestros de la música guapachosa, juntar sus poderes para armar una gran fiesta. Lo lograron, el Double Door hervía con los track que soltaban y no pararon hasta casi llegar a las 2 horas de show. Es interesante ver el legado de dos de los productores más emblemáticos de la música mexicana mezclando canciones de Toy Sellectah y el IMS, o de las bandas que producen, o simplemente de la música que les gusta. Sin embargo me parece que el proyecto está inflado y sobrevalorado.

Lo importante de todo es saber que estos dos músicos han sido parte fundamental para el desarrollo de muchos artistas que hoy representan a la escena mexicana, y verlos divertirse en el escenario como súper compas es suficiente para pasar el rato moviendo los pies y sacando a bailar a las muchachas.

Después de que lograron subir la temperatura de todos los presentes, no quedó más que dar el último trago de cerveza, y salir a la helada realidad de -2 grados y tomar el tren de vuelta a casa

Siempre es un placer disfrutar de un pedazo auditivo de México y sentirse cerca, a pesar de tantos kilómetros de distancia. Es increíble que la música tenga esa magia.

Texto y Fotos por The Golden Zebra.

¿Qué hace normalmente una persona a los 16 años? Va a mitad de la preparatoria, practica algún deporte tal vez, vuelve a casa a hacer su tarea; se divierte yendo al cine con sus amigos los fines de semana. Bueno pues a los 16 años, la inglesa FKA twigs ya componía y producía sus primeras canciones, sí, ¡16 años!

A los 17 comienza su carrera en Londres como bailarina, apareciendo en videos de Kylie Minogue y Ed Sheeran.

Pero es hasta el 2012 cuando decide unir todos estos precoces talentos y lanzar su primer proyecto sonoro: EP2.

Y es que cuando un artista sale a la luz y demuestra increíbles dotes de composición, producción musical, coreografías magistrales y además produce sus propios videos musicales, quiere decir estamos ante algo muy muy importante.

Es en 2014 donde llega su Album debut LP1, una joya musical que la catapultó al éxito mundial y que le mereció la nominación al Mercury Price, varios Brit awards,etc.

LP1 contiene una insólita combinación de sonidos, texturas, líricas y ritmos. «R&B», podríamos argumentar de manera limitante. Snares, octopads y sintetizadores oscilantes, coros octavados y en delay. Un tratamiento inigualable de composición de sonido, la mayoría de los sintetizadores producidos para este material, fueron generados a través de hi-hats (platillos de bateria) afinados en diferentes notas y en reversa. Trap y hip-hop con detalles industriales, sublimados por voces etéreas y melódicas que evocan sensualidad y cadencia.

Les invito entonces a que se dejen atrapar por el misticismo hipnotizante de la música, la danza y el sublime trip ¿pop? de FKA twigs. Puro talento Nato.

Aquí su presentación brutal en los Brit Awards 2015

«Two Weeks» Producido y dirigido por ella misma

LP1, su más reciente producción.

«Glass & Patron» Su ultima producción visual, lanzada ayer y nominada a los Youtube Awards.

La música tiene el poder inminente de cambiar la vida de las personas, ya sea escuchando una canción que marcó una etapa de ésta, o tocándola para expresar ideas o algo que sientes. O mejor aún, cuando te da la oportunidad de recorrer el mundo. Cruzar fronteras.Presentarte ante un público que tal vez no te conoce, o que ni siquiera habla tu mismo idioma.

Esta última es la historia actual y la cotidianidad de Caloncho, quien hace dos años dedicaba parte de su tiempo a vender bicicletas, y ahora lo dedica a regalar fruta a la gente en medio de sus presentaciones en vivo, tocando por todas partes.

En esta ocasión la música los invitó a presentarse en la Ciudad de Chicago y a mí a tener la oportunidad de coincidir en otros lugares y tiempos.

Al saber que venían a tocar acá, no dudé en comunicarme directamente con ellos, y es que ya habíamos tenido acercamientos anteriormente.

Después de haber perdido un vuelo en la ciudad de Austin  post South by Southwest,y retrasarse en el itinerario, las cosas parecían pintar excelente. Afuera del venue había ya una gran fila y expectativa para que iniciara el show. Al salir del lugar se pudo sentir el apoyo inmediato de los asistentes.

El show, inmejorable. De sus riffs de guitarra y su voz suave y tropical, nacían gaviotas y te proyectaban a un atardecer en punta cometa. Y es que su éxito radica, creo yo, en algo que a miles de artistas les toma mucho tiempo lograr. Conceptualizarse, brindarle al escucha la posibilidad de cerrar los ojos y teletransportarse  a otro lugar, sentir el calor de la playa, aunque estés en una ciudad a 2 grados bajo cero. Ir en el súper mercado y escuchar «Palmar» al ver una penca de plátanos en la sección de frutas.  Generar un imaginario colectivo. Un significado más allá de una canción. Arte.

Al final, a pesar de la agenda apretadísima, el tiempo condicionado, la resaca de la fiesta y el inclemente viento helado de la mañana, tuvimos oportunidad de vagar por la ciudad del viento. Conocer Navy Pier; subir a la rueda de la fortuna y contemplar los tonos claros del Lago Michigan;contemplar la arquitectura majestuosa del Downtown de Chicago. Hasta poder compartir y disfrutar de un manjar de comida española.

Chequen acá un fragmento del show y una entrevista en exclusiva para Golden Zebra.

Textos, fotos, entrevista y videos, exclusivos para Golden Zebra.

Recuerdo cuando mi vida giraba alrededor de la música, del rock específicamente. Tocar, ensayar y componer era mi vida, mi sueño y mi pasión. ¿Pero dónde quedo todo esto? ¿Dónde quedo ese anhelo y pasión que daba forma a mi vida? ¿Dónde quedaron esas personas que compartían la misma visión que yo?

Personalmente nunca he dejado de tocar y aunque no he sido lo suficientemente constante y dedicado, me he mantenido dándole, banda a banda y jam a jam. Pero últimamente caigo en la cuenta de que se está volviendo cada vez más complicado seguir adelante. A la edad que tengo, en la que mi profesión y la necesidad me hicieron un Gódinez más, al igual que a varios de mis amigos, se está volviendo muy complicado juntarse a hacer música. Y es que entre el trabajo, las relaciones personales, la falta de interés y la falta de buenos músicos (¡y músicos en general!), mi sueño se está tornando cada vez más complicado.

Recuerdo que cuando era más joven y no tenía la necesidad de ser Godínez, ensayar era una cosa sencilla, podíamos ensayar dos o tres veces a la semana, con 5 o más personas al mismo tiempo y todos soñábamos con seguir rockeando toda la vida. Ahora esto es cosa del pasado, se convirtió en tan solo un buen recuerdo, opacado por el rápido paso de los años y el ritmo de vida modero.

La verdad es que no juzgo a quienes dejaron la música, sea parcial o totalmente. Entiendo que la vida es complicada y que generalmente le corta las alas a muchos. Necesitas dinero y para tener dinero necesitas trabajar y para trabajar necesitas dejar de hacer lo que te gusta y dejar de hacer lo que te gusta, es generalmente, cumplir órdenes que no te gustan. Ni pedo, lo entiendo, es normal y a la mayoría nos pasa. Pero… ¿No sería mejor seguir el sueño? ¿Apoco no les gustaría dedicar aunque sea una pequeña porción de su tiempo en algo que si les satisface?

A mí personalmente me encantaría encontrar a ese selecto grupo de personas con el mismo sueño que tengo, gente que sin esperar la fama busque componer y crear música de calidad. Gente comprometida con los ensayos, abierta a experimentar, dispuesta a sacrificar muchas cosas por la pasión… No los veo. Ahora toco solo, en mi casa, sin un baterista, sin un bajo… solo, pero sabiendo que, al menos, esos pequeños momentos hacen mi vida mejor y que si llega la oportunidad la voy a tomar sin reparos.

Esta aportación no tiene otro objetivo más que expresar mi sentir y de paso incentivarlos a seguir haciendo lo que les gusta, no importa la edad, no importa el momento, siempre se puede encontrar un momento que dedicar a lo que nos gusta y apasiona. Y es que como en el amor, para el rock no existen edades.

Felicidades a los que le siguen dando, mis respetos.

Me voy, tengo que enviar un reporte y ya le dedique bastante tiempo a esto…

P E A C E .

E.

Cabellos rosas y azules radioactivos; uñas despintadas; pantalones rotos, acampanados, estilo Norm Core y playeras con estampados de bandas; secuencias, coros a cuatro voces y un hermoso bajo Rickenbacker.  Esta es la nueva versión del rock femenino en tiempos del indie.

Desde Los Angeles California, tenemos a Warpaint. Un grupo de rock indie formado en 2004 por Emily Kokal (vocalista principal, guitarra), Theresa Wayman (guitarra, vocalista), Jenny Lee Lindberg (bajo, coros) y Stella Mozgawa (batería).

Con dos discos de carrera: «The fool» (2010) , «Warpaint» (2014) y un EP grabado y masterizado por el ex novio de Emily, John Frusciante (Ahí nomás), este grupo muestra gran solidez y madurez que se expresa de manera natural al escucharlo.

Con un Dream pop que oscila en lo psicodélico pero que permanece en la órbita gracias a las voces dulces y las guitarras sencillas que no abusan de efectos rebuscados pero sí mantienen una rítmica constante, las californianas logran mantener un estado ecuánime bastante agradable para aprovechar durante caminatas o mientras trabajas.

Su sonido es natural y muy sencillo. Pero no me mal interpreten, como dicen por ahí «less is more», y como buen músico frustrado sé lo complicado que es lograr amalgamar una idea y alcanzar un punto en el que todo cobre sentido. Sonidos orgánicos, no forzados. Vaya que éstas chicas saben hacerlo, ¿El secreto? «Empezamos la banda de una manera muy ingenua, había días que pasábamos horas tocando sobre 4 acordes, hasta que algo más sólido emergía, pero sabíamos que sucedería. Siempre supimos que teníamos algo especial y por eso persistimos» cuenta Emily. Pura talacha, paciencia y dedicación.

Simpáticas pero a la vez atrevidas y con mucha, muuuucha actitud; como la novia que te presentó canciones de Nirvana, o la amiga que usaba playeras punk y tennis de skate.

La verdad es que da gusto ver propuestas y grupos conformados por mujeres que se salgan de lo cotidiano, que dejen de hablar sobre como les rompieron el corazón y de tocar canciones tristes y cursis. Disfruten pues, a continuación del primer sencillo «Disco/Very», además de una excelente presentación en vivo y la liga para escuchar su más reciente disco.

Siempre he tenido una extraña fascinación por las tiendas de música. Desde que era niño me encantaba meterme a la sección de discos en los super mercados y tiendas departamentales, mientras esperaba a que mis papás hicieran las compras. Me pasaba horas observando discos, viendo las portadas, escuchando todos los albums que tenían de muestra. Y ni se diga de las tiendas de instrumentos. El salón de juegos de los músicos, lo proporcional al forever 21 de las muchachas, al Disney de los niños.  De ser posible, pasaría el día entero probando las baterías eléctricas, jugando con los teclados y recorriendo las paredes tapizadas con guitarras.

Este fin de semana, en una de mis caminatas volví a encontrar mi tienda favorita en Chicago. «Transistor», un pequeño inmueble subterráneo que alberga en su interior la combinación perfecta de lo que les he estado contando: Filas y filas de vinilos de música independiente, todos con su respectiva copia, uno sellado para venta y otro abierto para que puedas ponerlos en alguno de los 12 estilos de tocadiscos que tienen. Además, en uno de los rincones de la tienda, se encuentran 4 repisas con curiosos instrumentos: Sintetizadores de bolsillo hechos a mano y otros fabricados por la marca Korg. Lo mejor de todo es que al acercarme a ellos, el dueño de la tienda pronunció las palabras mágicas: «Abajo de la última repisa hay un amplificador, conecta el que quieras para probarlos». Así lo hice, conecté uno por uno y estuve, sin exagerar, 40 minutos usando todos los synths que tenía. Charlie (el dueño) me explicó las funciones de cada uno y la forma de grabar los sonidos.

Este lugar es a su vez una galería que muestra el trabajo de más de 80 artistas, de Chicago en su mayoría. Por las noches de miércoles y jueves proyectan películas y, por si fuera poco, este Oasis melómano tiene presentaciones de grupos en vivo todos los viernes, además de transmitir  por radio online 8 programas a la semana, llenos de recomendaciones musicales de diversos géneros. «Es como si fuera el departamento más cool de uno de tus amigos, en el que siempre quieres estar pasando el rato». Así lo definió Charlie.

No tuve que pensarlo mucho. Era viernes y yo no podía esperar para ir a ver una de las presentaciones live que ofrece transistor. XelmYa estaba tocando. Un trío de Berlin de música clásica contemporánea (así, tal cual, como se lee)  constituído por 3 chicas: Violín, Cello, vientos. Su presentación fue sumamente extraña, tan extraña como la definición de su género.

A pesar de la presentación tan experimental, el ambiente era bastante ameno y las personas muy amables; lo mejor de todo es que además puedes llevar tu propio six de chelas para disfrutar del show.

¿Qué más se puede pedir con un modelo de negocio como éste? Sin duda, si tuviera los recursos y si la gente en México apoyara estos conceptos, no dudaría en poner «departamentos cool» como este por todos lados, para hacer felices a todos los músicos y ver cómo se transforman en niños al entrar a un paraíso en donde puedes tocar el tiempo que sea y echar chela mientras escuchas música en vivo dentro de la tienda.

http://www.transistorchicago.com/photos

El jazz. Ese complejo, extraño y a veces casi ilógico estilo musical que ha dado vida a algunos de los mejores músicos del planeta, y que muy pocos tienen el privilegio de entender. Un estilo que me gusta ,pero que, con mi vago conocimiento musical no alcanzo a comprender totalmente, se vio envuelto en algo que a mi y a mis conocidos nos causó mucho ruido…

En estos días, vagando por la red social mas concurrida del mundo tuve la oportunidad de ver a Noel Gallager hablando sobre Jazz, imprimiendo su ya tan característico humor e ingenio en cada palabra, refiriéndose a dicho genero musical como: “4 personas que tocan cada una por su lado, sin congruencia y sin sentido”. Esto no paso desapercibido entre mis conocidos y allegados que se dedican al jazz, a los que les pareció una total falta de respeto… Y como no, tantos años estudiando y les salen con eso. La verdad que yo tampoco estoy de acuerdo y siendo un gran amante de la música les quiero recomendar un poco de música Jazz/Fusion para que no se dejen llevar por los arranques del Inglés y, mejor, formen su propia opinión. Quizá hasta lo disfruten, y quizá, empiecen a escuchar jazz por su cuenta.

BadbadnotGood

The Odd Future Session Pt.1

Eric Clapton, Marcus Miller y de mas musicasos. Legends Live at Montreux 1997

Marcus Miller-Run For Cover.

Espero hayan disfrutado las recomendaciones, ya cada quien pensará lo que quiera y tendrá su propio criterio al respecto de este tema, y aunque me gustan algunas canciones de Oasis, yo no le compro las palabras a Noel. Les dejo el video y la traducción de su speech para que juzguen ustedes.

“It`s like four guys on stage, enjoying themselves more than the fifty people on the audience. Thats what it is, they´re four guys playing different songs, all at the same time, in different tempo, in different keys and they call it jazz. it´s fucking nonsense».

P E A C E.

E.